Por Evelyn Cantore
¿Qué harías si tu pareja te propone invitar al ex de una gran amiga tuya, a cenar con su nueva novia, que es varios años menor que él? ese es el dilema que tiene lugar en Sin Filtro, protagonizada por Gabriel “Puma” Goity y Carola Reyna, que encarnan a un matrimonio de muchos años.
Martín (Carlos Santamaría) responde al típico estereotipo de hombre que ve a su nueva pareja, Eva (Muni Seligmann), como si fuera un trofeo, y basa su felicidad en encajar perfectamente en lo normativo. Todo aquello por lo que se considera superior, lo utiliza para despertar envidia e ira en su amigo Daniel (Goity). Seligmann, por su parte, encarna a una joven que se autopercibe y muestra como un objeto seductor.
A través del humor, la obra francesa, cuyo título original es L Envers du Décor, plantea el choque entre lo que se dice y lo que realmente se piensa, ¿cuánto se calla o se disfraza para que no caiga tan mal? ¿Hasta qué punto se llega a conocer al otro y cuánto es mera idealización?
Bajo la dirección de Marcos Carnevale, el éxito está asegurado con la presencia de una gran dupla como Goity y Reyna.
Si hay algo en lo que no escatimaron, es en la escenografía, que denota el nivel de la diseñadora Alicia Leloutre. Un living completo, con bar, escritorio y biblioteca, y una cocina con las cerámicas en tonos azules. Representa un hogar moderno, habitado por dos personas de clase media acomodada.
Para separar una escena de otra, el recurso utilizado en cuanto a la iluminación es el apagón, que viene acompañado por los aplausos del público.